Enviadpo por email el 5/10/2005
Quiero que hugo se lo gane porque se lo merece, se lo merece tanto como Yasser Arafat que lo ganó secuestrando aviones y matando gente.
¿Es o no es el Nóbel la misma insigne institución que le negó el galardón a Juan Pablo II pero sí se lo otorgó a Jimmy Carter, es esa la misma valiosa organización que cuenta entre sus filas de certificados pacificadores a rigoberta menchú y adolfo perez esquivel, insignes postulantes de la candidatura de hugo a tan reconocido galardón, reconocimiento que le dará licencia internacional para hablar pendejadas y ser venerado, ¿Es o no es el Nóbel esa tan importante herramienta para arrear pueblos y sumirlos en la ignorancia revolucionaria, aplaudida y aupada por tan loable izquierda socialista, que adormece al mundo mientras la esclaviza, que le quita la libertad de ser y crecer y la cubre en un falso manto del progreso y justicia social?
Hace ya bastante tiempo que esa maravillosa institución, tomada por el "benévolo" socialismo sueco, juega el mismo juego al que contribuye la complutense, que cuenta entre sus galardonados además de hugo, con sadam hussein y el último presidente de la república "democrática" de Alemania, herr honeker, entre otros merecedores de licencias para reprimir.
Yo sé que saltarán, me dirán extremista y loco, radical derechista y paranoico, pero simplemente me cansé. Ya es hora de que el país entienda que es una pieza en un tablero de juego global, y que, si no aprende a jugar, perderá.
Para ganar hay que despertar del adormecimiento y sólo recuperando el orgullo de ser venezolano lo lograremos.
Noel Alejandro Leal Rojas
5-10-2005
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