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Ya estamos a las puertas de nueve años de adoctrinamiento de las generaciones del mañana.
Sin duda la capacidad de manipulación de la revolución y de la oposición colaboracionista no tiene parangón en nuestra historia. Llevar a la población a la discusión estéril de aprobar o no la reforma, es decir votar o abstenerse, sobre si se quiere ser libre o esclavo, es tan aberrante que la sensación que me causa sólo logro definirla
Impedir la reforma no sólo es moral, ético y justo, impedir la reforma es el camino para poner fin al inframundo comunista entre la tímida y oscura carcajada del miedo y el abismo profundo de la tristeza.
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El problema no es la reforma, el problema es la revolución, el problema es la cabeza de esta barbarie, el problema es Chávez y su horda criminal. La reforma es sólo otra losa más sobre nuestro sepulcro, una paila más en el infierno revolucionario.
Hoy sesudos analistas y grandes doctos de la política colaboracionista celebran el gran avance que ha logrado la oposición al enfocar un objetivo menos ambicioso que la salida del autócrata criminal, que es prudente estructurar una maquinaria electoral sólida, que es importante que se trasmita la misma sensación de seguridad que dieron los votos blindados del referéndum revocatorio del 2004, o el yo si voy a cobrar el triunfo del 3 Diciembre del 2007.
Es esta mezquina y apátrida visión la que alimenta la absurda idea de ganar electoralmente en el 2012 o 2013. En realidad ese detalle no importa, tomando en cuenta que de aquí allá siguiendo el ritmo de destrucción física, social, moral y espiritual implantado por la revolución, simplemente no habrá Venezuela, sólo seremos lo que le venga en gana al monarca.
Ya estamos a las puertas de nueve años de adoctrinamiento de las generaciones del mañana, vamos a sumarle el lustro que proponen esperemos y veamos un episodio de este futuro.
La voluntad democrática de una población opositora totalmente debilitada y desmoralizada luchará contra la versión actualizada y mejorada del CNE de ese tiempo para evitar que Hugo I logre alcanzar un nuevo estatus, esta vez dejando atrás el estatus monárquico buscará el nivel de deidad entronizada, lo que lograría gracias a una traicionera, ambiciosa y cobarde dirigencia política que entonó con todas sus fuerzas burlones cantos de sirenas opacando así el llanto de los hijos de la patria.
¿Pero cómo es posible que la población sea manipulada de una manera tan evidente y sin embargo no reaccione?, pues la respuesta es verdaderamente fácil, todos los sectores de la oposición dejan claro que este régimen criminal llevará al país directo al mar de la felicidad.
Pero un grupo de ellos logran hacer fuerte una mentira agradable de escuchar porque no implica enfrentar la verdad, esa verdad que certifica que no existe vía electoral que evite que el país se hunda en ese mar.
Impedir la reforma no sólo es moral, ético y justo, impedir la reforma es el camino para poner fin al inframundo comunista dentro de nuestras fronteras, impedir la reforma es el camino para hacer realidad el Fuera Chávez.
Noel Alejandro Leal
noelalr@gmail.com
02-11-2007
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